Un documental peculiar y revelador sobre la familia inmediata que dejó el pintor armenio-estadounidense Arshile Gorky, creado por la nieta de Gorky, Cosima Spender, el film documenta la ausencia del gigante del arte moderno y el residuo de su vida y su arte en quienes continúan viviendo con su patrimonio y legado. Sin Gorky es un viaje personal hacia una poderosa tragedia familiar. En el centro de la película están las conversaciones entre la directora, Cosima, y su abuela, Mougouch.

A menudo definido como el último surrealista y el primer expresionista abstracto, Arshile Gorky aparece como un intersticio dentro de la progresión lineal de la historia del arte. Gorky adoptó las imágenes oníricas en la tradición de los surrealistas, utilizó patrones integrales antes de Jackson Pollock, promovió el color incorpóreo antes de Mark Rothko, explotó la fisicalidad de la pintura antes de Willem de Kooning y anticipó la pintura con manchas. Pero su vida y sus tumultuosas relaciones personales han presentado al artista como una figura trágica y, a menudo, eclipsado el genio de su arte.

Sobreviviente del genocidio armenio, escapó a la incipiente Primera República Armenia antes de que fuera tomada por los soviéticos en 1920. Muchas cosas que rodean a Gorki son frustrantemente incompletas, y las historias que han surgido han sido algo insatisfactorios porque siempre omiten algo. La autoinvención es elemental para todo artista, pero para Gorky fue extrema. No fue hasta después de su muerte en 1948, alrededor de los 46 años (no hay documentación segura de su fecha de nacimiento), que su esposa supo su verdadero nombre, Vosdanig Adoian, y que era armenio. Su inestabilidad psicológica en la edad adulta adquiere un cariz diferente a la luz de la revelación de que experimentó el genocidio de primera mano, cuando era niño, y vio a su madre morir de hambre.

Como fuerza creativa y destructiva, Gorky persiste. Cualquier tregua que la directora capture en pantalla parece provisional y, por muchas respuestas que encuentre sobre su abuelo, Sin Gorky nunca sugiere que esta familia traumatizada alcanzará fácilmente la resolución o la paz.