El trabajo de la artista Cornelia Ann Parker es un desafío visual que rompe con las barreras de la estructura y la unicidad. Su obra se caracteriza por transformar objetos de uso diario en escenarios inesperados e inquietantes. En las manos del artista, los objetos domésticos y familiares se explotan, se disparan, se vuelven hacia atrás y se reorganizan de maneras a menudo sorprendentes.