Cuando la curadora Lauren Hinkson comenzó a trabajar en el Museo Guggenheim de Nueva York, realizó un hallazgo que le sorprendió. Se trataba de varias fotografías que el artista Josef Albers, mejor conocido como pintor y teórico de la escuela Bauhaus, tomó en México en los años treinta. El resultado fue una exhibición que estuvo en el Museo Guggenheim en 2018.
En el invierno de 1935, Josef Albers y su esposa, Anni, llegaron a México. Cautivados por las pirámides, el arte popular y los colores de una nación que estaba en plena reconstrucción después de una revolución que duró una década, los Albers abrazaron al país como fuente de inspiración para su creación artística. “En realidad México es la tierra prometida del arte abstracto… pero aquí ya lleva miles de años”, escribió Josef Albers a su colega Kandinsky.
Esta fue la primera ocasión que una muestra reúne y exhibe una vasta colección de fotografías personales y collages que el artista elaboró, muchos de los cuales jamás habían sido expuestos. En este breve video de 3 minutos podemos echar una ojeadita al menos al encuentro de Josef Albers con las ruinas arqueológicas de México que profundiza su interés en la fotografía e inspira sus experimentos con el arte abstracto.

